21 abril 2015

Somos únicas y nuestros hijos lo saben

Muchas veces creemos que nuestra labor como madre no es muy apreciada ni por los esposos ni por los hijos. Acá compartire un video que nos sacará algunas lágrimas ya que desde la concepción nuestros pequeños y tiernos hijos pueden reconocernos hasta con los ojos vendados. Tan solo les basta olernos o tocarnos. Recordemos cuando eran bebes y los amamantamos hasta por lo menos 2 años suficiente tiempo para que nuestro aroma se impregne en su cerebro y corazón. 




Recordemos somos ÚNICAS para nuestros hijos.

Tengan un excelente día.

26 junio 2014

Carta de un pequeño traviezo a sus padres

PAPI Y MAMI:

1.- "Mis manos son pequeñas y por eso se me cae la leche aunque no quiera..."

2.- "Mis piernas son cortas, por favor, espérame y camina más despacio, así puedo andar contigo..."

3.- "No me pegues en las manos cuando toco algo y de color brillante... Es que quiero aprender..."

4.- "Por favor, mírame cuando yo te hablo. Así se que estas escuchas..."

5.- "Mis sentimientos todavía son tiernos, no me regañes todo el día... Deja que me equivoque sin hacerme sentir tonto..."

6.- "No esperes que la cama que haga o el dibujo que pinto sean perfectos. Amame por el hecho de haber tratado de hacerlo lo mejor posible..."

7.- "Recuerda que soy un niño, no un adulto pequeño... A veces no entiendo lo que me dices..."

8.- "Te quiero tanto... Por favor,Amame por lo que soy, no por las cosas que hago..."


9.- "No me rechaces cuando estas molesto conmigo y vengo a darte un beso... Me siento solo, abandonado y con miedo..."

10.- "Cuando me gritas me asusto... Por favor explícame lo que he hecho..."
11.- "No te enfades cuando en las noches las sombran y la oscuridad me dan miedo cuando me despierto y te llamo... Tu abrazo es lo único es lo único que me devuelve la paz..."

12.- "Cuando vamos a la tienda no sueltes mi mano creo que voy a perderme y que no me encontrarás jamás..."

13.- "Me siento muy triste cuando ellos discuten... A veces pienso que es por culpa mía y se me encoge el estómago y no se qué hacer..."

14.- "Muchas veces veo que abrazas y acaricias a mi hermano... ¿Es que lo quieres más que a mi? Quizá ¿Porqué es más lindo e inteligente?, pero yo... ¿No soy tu hijo también?..."

15.- "Me regañaste duro cuando rompí mi juguete favorito y mucho más cuando me eche a llorar. Yo estaba triste y peor que tu... No lo hice a propósito y me quede sin el..."

16.- "Te molestaste por que me ensucie jugando. Pero es que la sensación del barro en mis pies era tan rica y la tarde tan linda... Ojalá supiera lavar para lavar mi ropita..."

17.- "Hoy te sentiste mal y yo me preocupe mucho. Trate de entretenerte con mis juegos, mis cuentos, ¿qué haría yo si a ti te pasara algo?..."

18.- "Me meten miedo con el infierno y no se lo que es... Pero pienso que debe ser algo así tan terrible como estar sin ti..."

19.- "Aunque me dejaron con los tíos y la pase buen, los extrañe mucho toda la semana. Ojalá no hubiera vacaciones para los papas!"

20.- "Tengo mucha suerte! Entre todos los niños que hay en el mundo, ustedes me escogieron a mi..."


Realmente me movio el corazon leer todas estas frases que imagine mi hijo me lo podria estar diciendo ya que en ocaciones soy muy estricta y me cuesta recordar lo vandida que era en mi infancia y lo bien que la pasaba y lo mal que la pasaban mis padres con cada embarrada y rota de ropa. 


Nunca es tarde apra recordar y mejorar, evitemos amarrar a nuestros niños ya que solo una vez en su vida viviran felices sin preocupaciones y esa etapa es esta SU

NIÑES.

08 junio 2014

Como dejar de gritar a nuestros hijos

Quiero compartir una lectura que encontre en internet me lleno de mucha reflexion y creo que servira a muchas de nosotras y a los papitos también.

 Como madre, le doy un gran valor a cada nota que recibo de mis hijas, ya sean garabatos indescifrables o cartas con caligrafía perfecta. Pero el Día de la Madre recibí de mi hija de 9 años un poema que significó mucho para mí. De hecho, la primera línea me hizo contener el aliento mientras cálidas lágrimas se deslizaban por mi rostro.
"Lo importante de mi mamá es... que siempre está ahí para mí, incluso cuando me meto en problemas."
Verás, esto no fue siempre así.
En el medio de mi vida extremadamente distraída, comencé una nueva práctica que era muy diferente a mi comportamiento usual. Me convertí en una gritona. No lo hacía siempre, pero eran momentos que vivía muy intensamente, como cuando se infla demasiado un globo y éste explota, causando sobresalto y temor.
Pero ¿qué me hacía perder la calma ante mis hijas de 3 y 6 años? ¿Era que ella insistía en buscar tres collares más y sus anteojos favoritos cuando ya estábamos llegando tarde? ¿Era que quería servirse sola su cereal y tiraba la caja entera en la mesa de la cocina?
¿Fue que ella se tropezó y rompió un ángel de vidrio que era muy especial para mí, a pesar de haberle dicho que no lo tocara? ¿Fue que luchó como un boxeador para no dormirse justo en el momento en que yo más necesitaba paz y tranquilidad? ¿Será porque las dos pelearon por cosas insignificantes como por ejemplo, quien era la primera en salir del coche o la que tenía más salsa de chocolate en su helado?
Si, eran ese tipo de cosas típicas que les suceden a los niños que me irritaban hasta el punto de hacerme perder el control.
No es fácil reconocer esto. Así como tampoco es fácil revivir esa etapa de mi vida, porque, siendo honestos, me odiaba a mí misma cuando me sucedían esas cosas. ¿En qué me había convertido que tenía que gritar a las dos preciosas personitas que más amaba en la vida?
Déjame contarte como era mi vida en aquel entonces:
Mis distracciones:
El uso excesivo del teléfono, la sobrecarga de compromiso, mis extensas listas de tareas, y la búsqueda de la perfección me estaban consumiendo. Y gritarle a los que amaba fue el resultado directo de la pérdida de control que estaba experimentando en mi vida.
Inevitablemente, me derrumbé. Y lo hice precisamente en la intimidad de mi hogar, en la compañía de aquellos que eran lo más importante en mi vida.
Hasta que un triste día…
Mi hija mayor se había subido en un taburete y estaba buscando algo en la despensa cuando accidentalmente tiró un paquete entero de arroz en el piso. Una lluvia de diminutos granos se esparció en el suelo. Al ver eso, los ojos de la pequeña se llenaron de lágrimas. Y fue ahí cuando pude ver el miedo en sus ojos al prepararse para el regaño violento de su madre.
“Me tiene miedo”,_pensé con la más dolorosa comprensión que te puedas imaginar. “_A mi hija de seis años le asusta mi reacción ante un inocente error.”
Con una profunda pena, me di cuenta que no quería vivir así el resto de mi vida y que no era la madre que quería para mis hijas.
A las pocas semanas de ese episodio toqué fondo. Fue un momento de dolorosa toma de conciencia que me impulsó en un viaje de liberación para desprenderme de las distracciones y comprender lo que realmente importaba en la vida. Fueron dos años y medio de ir reduciendo lentamente los excesos y las distracciones electrónicas…dos años y medio de liberarme de los estándares de perfección inalcanzables y de esa voz interna, guiada por las presiones sociales, que me decía “hazlo todo”.
Cuando fui abandonando mis distracciones internas y externas, la ira y el estrés que tenía reprimidos dentro de mí lentamente se fueron disipando. Más alivianada, fui capaz de reaccionar ante los errores y malas acciones de mis hijas de una manera más tranquila, compasiva, y razonable.
Por ejemplo, comencé a decir cosas como: “Es sólo jarabe de chocolate. No pasa nada, puedes limpiarlo y la mesa de la cocina estará como nueva” (En lugar de lanzar una mirada furiosa y poner los ojos en blanco)
Me ofrecí a sostener la escoba mientras ella barría un mar de cereales que cubría el piso.(En lugar de quedarme de pie junto a ella con una mirada de desaprobación y absoluta molestia.)
La ayudé a pensar donde podrían estar sus lentes. (En lugar de quejarme por su irresponsabilidad).
Y en los momentos en que el agotamiento y la rabia estaban a punto de ganarme, entraba en el cuarto de baño, cerraba la puerta y me tomaba un momento para respirar profundamente y recordarme a mí misma que son niños, y los niños cometen errores. Así como yo también los cometía.
Con el tiempo, desapareció el temor que una vez brilló en los ojos de mis hijas cuando estaban en problemas. Y gracias a Dios, me convertí en un refugio al cual acudir en tiempos difíciles, en vez de ser un enemigo de quien huir y esconderse.
No sé si hubiera escrito sobre esta profunda transformación si no fuera por el incidente ocurrido el último lunes. En ese momento saboreé cuan abrumadora puede ser la vida y cómo las ganas de gritar pueden apoderarse rápidamente de mí. Estaba terminando los últimos capítulos del libro que actualmente estoy escribiendo y mi computadora se trabó.
De pronto los últimos tres capítulos que había estado corrigiendo desaparecieron frente a mis ojos. Pasé algunos minutos tratando de volver a la última versión del manuscrito. Cuando eso falló, intenté buscar si tenía guardada una copia de seguridad en la computadora. Al darme cuenta que nunca iba a recuperar el trabajo, me dieron ganas de llorar, y aún peor… quise rugir como un león.
Pero no pude porque ya era la hora de recoger a los niños de la escuela y llevarlos a natación. Con gran moderación, cerré mi laptop muy tranquila y me recordé a mí misma que podría haber tenido un problema mucho peor que volver a escribir estos capítulos. Entonces me dije: no hay absolutamente nada que pueda hacer sobre este problema en este momento.
Cuando mis niños entraron al auto, inmediatamente se dieron cuenta que algo andaba mal. “¿Te pasa algo, mamá?” Me preguntaron al unísono, después de haber tomado un vistazo de mi pálido rostro.
Sentí ganas de gritar: “¡Perdí tres días de trabajo en mi libro!”
Tuve ganas de pegarle un puñetazo al volante porque el último lugar donde deseaba estar era sentada en el auto. Quería ir a casa y arreglar mi libro, no llevar a las niñas a natación, escurrir sus trajes de baño mojados, peinar sus cabellos enredados, hacer la cena, lavar los platos y acostarlas.
Pero en lugar de eso, dije con calma: “Me pone mal hablar en este momento. Perdí parte del libro que estoy escribiendo. Y no quiero hablar porque me siento muy frustrada”.
“Lo sentimos mucho”, dijo la mayor. Y entonces, como si supieran que yo necesitaba soledad, se quedaron tranquilas todo el tiempo que estuvieron en la piscina. Durante el resto del día estuve más calmada que nunca, no les grité e hice mi mayor esfuerzo para no pensar en el asunto del libro.
Al final del día, después de acostar a mi hija menor me senté al borde de la cama de la mayor para conversar un rato con ella.
“¿Piensas que podrás recuperar tus capítulos? Me preguntó.
Y ahí fue cuando comencé a llorar, no tanto por los capítulos perdidos, ya que sabía que los podría reescribir. Sino que mi angustia tenía más que ver con lo agotador y frustrante que puede ser escribir y editar un libro. Había estado tan cerca del final. Sentir que se me había arrebatado esa posibilidad fue increíblemente decepcionante.
Para mi sorpresa, mi hija se acercó y me acarició el pelo suavemente mientras me decía unas palabras muy tranquilizadores: "Las computadoras pueden ser muy frustrantes", "Yo podría echar un vistazo para ver si podemos recuperar los capítulos.” Y finalmente: "Mamá, tu puedes hacer esto. Eres la mejor escritora que conozco", " Te ayudaré en todo que pueda".
En mis momentos difíciles, allí estuvo ella alentándome, muy paciente y compasiva, sin aprovecharse jamás de mi momento de debilidad.
Mi hija no habría aprendido nunca a ser empática si yo hubiera seguido siendo una gritona. Los gritos apagan la comunicación, rompen los vínculos, hacen que las personas se separen en lugar de acercarse.
"Lo importante es... que mi mamá siempre está ahí para mí, incluso cuando me meto en problemas."
Lo importante es… que no es tarde para dejar de gritar.
Lo importante es… que los niños perdonan, especialmente si ven que la persona que aman está tratando de cambiar.
Lo importante es… que la vida es muy corta para enojarse por pequeñeces como el cereal derramado o zapatos fuera de lugar.
Lo importante es… que no importa lo que pasó ayer, hoy es un nuevo día.
Hoy podemos elegir responder pacíficamente.
Cuando lo hacemos, le estaremos enseñando a nuestros hijos que la paz construye puentes, puentes que nos llevarán lejos de los problemas.

10 abril 2014

Lo difícil que es ser mamá tiempo completo y no trabajar

Es muy dificil asumir una decision como la de dejar de trabajar apra dedicarse tiempo completo a nuestros hijos pero por experiencia propia es muy gratificante, en lo personal por 6 años consecutivos me dedique por completo a mis hijos, tuve la dicha de tener un trabajo que podia realizarlo en casa y quiza por esa razon no pueda manifestar la frustracion que deben tener algunas "colegas" mias que extrañan su independencia financiera, pero creanme mamitas por mas que a veces nos entren esas ganas de llorar por que nadie nos agradece el duro trabajo que hacemos o es mas nos reciban con la frase "pero si no haces NADA" o mil cosas mas, es la experiencia mas gratificante que tendran con sus hijos ay que no se perderan lla primera palabra que digan o la primera gateada, el primer dia que caminen, el primer dia de clases los llantos las alegrias las guardaran en su corazon y quiza nosotras las mamis que trabajamos nos lo perdemos constantemente.

Aca les compartire una carta que quiza les de un poco mas de ánimo:

Querida Mamá Que Se Queda En Casa:

Algunas personas se preguntan qué es lo que haces todo el día en tu casa. Yo sé lo que haces porque soy mamá y yo también lo hice por un tiempo.
Yo sé que trabajas sin que te paguen, y a veces ni lo agradecen. Un trabajo que empieza desde el momento que te despiertas y ni si quiera termina cuando te vas a dormir. Yo sé que trabajas noches y fines de semana sin un fin discernible para tu día o semana de trabajo. Sé que las recompensas están llenas de gozo, pero son pocas.
Sé que raramente puedes tomar una taza de café o té caliente. Sé que tu atención siempre está dividida y desviada de momento a momento. Sé que nunca puedes contar con terminar una tarea en el mismo instante. Sé que nunca tienes un descanso ni aún cuando estas sola en casa, al menos que solo tengas un hijo(a) que todavía toma siesta durante el día (y aun así, hay mucho por hacer mientras duerme).
Yo sé los retos con los que tienes que lidiar diario y a veces sin apoyo: los berrinches, los accidentes mientras los entrenas para ir al baño, las batallas de comida, la comida en el piso, las crayolas en la pared, la rivalidad entre hermanos, el bebé que parece que nunca deja de llorar, etc. Yo sé que parece que el trabajo nunca termina, como un ciclo sin fin; compras comida, la preparas, intentas dársela a tus hijos, la limpias del piso, lavas los trastes y se repite todo en tres horas.
Yo sé que tienes fantasías de tener una hora solo para ti…para poder comer tu comida seguido, o poder tomar una siesta. Yo sé que a veces te preguntas si vale la pena y envidias a tus amigas que tienen un receso con un cafecito en su trabajo. Yo sé que a veces cuando tu pareja regresa a casa después de trabajar, todo lo que quiere es sentarse y subir los pies exactamente cuando tu más necesitas un descanso y a veces eso te hace llorar.
Yo sé que eres mal entendida por todos aquellos que no aprecian o valoran las dificultades de cuidar a niños chiquitos sola, todo el día y se refieren a ti como “la que no hace nada.” Te imaginan tomando café todo el día mientras tus hijos juegan en silencio. Yo sé que extrañas tu independencia financiera. Sé que cuando otras personas dicen “por fin es Viernes” es a veces molesto, ya que para ti todos los días son lo mismo, no hay Viernes, no hay descanso de fin de semana en tu trabajo. Yo sé que mucha gente no entiende que trabajas, simplemente trabajas en un trabajo que no paga y que es en casa.
Mamá que se queda en casa, yo no se como le haces. Te admiro por tu infinita paciencia y tu
habilidad de enfrentar cada día con una sonrisa y traer gozo a la vida de tus hijos aún cuando te agotan. Admiro tu dedicación a siempre estar presente en la vida de tus hijos aún cuando no es fácil. Admiro como trabajas sin esperar ninguna recompensa… no vas a ser promovido, no vas a ser famoso, no hay salario. Yo sé que lo único que te importa es que tus hijos se sientan importantes y amados y ,mamá, eres la mejor para hacer eso.
Solo quería que supieras que te entiendo. Las dos somos mamás y yo se.
Con mucho amor y admiración,
Mamá que trabaja.

09 abril 2014

La inocencia de nuestros niños es reflejo de una buena crianza.


Vivimos en una sociedad donde día a día observamos y vivenciamos actos negativos como drogadiccion, violencia, negligencias, etc. Existen seres que gracias a las condiciones que sus padres les dan son felices y aun mantienen su lado inocnte desconociendo todo aquello que en algun momento cambiará algunas de las respuestas que acontinuacion nos brindaron:



Encuesta realizada a niños de 2º y 3º año de primaria.
Estas fueron algunas de las respuestas más graciosas.


¿Quién es el jefe en tu casa?
1. Mi mamá no quiere ser jefe pero tiene que serlo porque mi papá es chistoso.
2. Mi mamá. Lo sabes por la inspección de mi cuarto. Ella ve hasta lo que hay debajo de mi cama.
3. Creo que mi mamá, pero solo porque ella tiene más cosas que hacer que mi papá.

¿Por qué hizo Dios a las Madres?
1. Porque son las únicas que saben dónde están las cosas en la casa.
2. Principalmente para limpiar la casa.
3. Para ayudarnos cuando estábamos naciendo.
4. Para que nos quisieran.

¿Cómo hizo Dios a las Madres?
1. Usó tierra, como lo hizo para todos los demás.
2. Con magia además de súper poderes y mezclar todo muy bien.
3. Dios hizo a mi mamá así como me hizo a mí, solo que usó partes más grandes.
4. Yo creo que tardó mucho en hacerlas, pues mi papá dice que a veces las mujeres son muy complicadas.

¿Qué ingredientes usó?
1. Dios hizo a las madres de nubes y pelo de ángel y todo lo bueno en este mundo y una pizca de malo.
2. Tuvo que empezar con huesos de hombres y después creo que usó cuerda, principalmente.
3. Yo creo que con muchas flores ...

¿Por qué Dios te dio a tu mamá en vez de otra mamá?
1. Porque somos parientes.
2. Porque Dios sabía que ella me quería más a mí que otras mamás que me quisieran.
3. Porque nos parecemos mucho.

¿Qué clase de niña era tu mamá?
1. Mi mamá siempre ha sido mi mamá y nada de esas cosas.
2. No sé porque no estaba yo allí, pero creo que ha de haber sido muy mandona.
3. Dicen que antes era muy linda.

¿Qué necesitaba saber tu mamá de tu papá antes de casarse con él?
1. Su apellido.
2. Si quería casarse con ella.
3. Pues... si tiene trabajo y si le gusta ir de compras.

¿Por qué se casó tu mamá con tu papá?
1. Porque mi papá hace el mejor spaghetti en el mundo y mi mamá come mucho.
2. Porque ya se estaba haciendo vieja.
3. Mi abuela dice que porque no se puso su gorra para pensar.
4. Para poder ser la mamá de la casa.

¿Cuál es la diferencia entre las mamás y los papás?
1. Las mamás trabajan en el trabajo y en la casa y los papás solo van al trabajo.
2. Las mamás saben hablar con las maestras sin asustarlas.
3. Los papás son más altos y fuertes, pero las mamás tienen el verdadero poder porque a ellas les tienes que pedir permiso cuando quieres quedarte a dormir en casa de un amigo.
4. Las mamás tienen magia porque ellas te hacen sentir bien sin medicina.

¿Qué hace tu mamá en su tiempo libre?
1. Las mamás no tienen tiempo libre.
2. Si lo oyes de ella, paga cuentas TODO el día...
3. Creo que... trabajar.

¿Qué haría a tu mamá perfecta?
1. Por adentro ya es perfecta, pero afuera creo que un poco de cirugía plástica.
2. Que no me regañara tanto y que me dejara ver más tele.
3. Si supiera jugar fútbol...

¿Si pudieras cambiar algo de tu mamá, que sería?
1. Tiene esa cosa rara de pedirme que siempre limpie mi cuarto. Eso le quitaría.
2. Haría a mi mamá más inteligente, así sabría que mi hermano me pegó primero y no yo.
3. Me gustaría que desaparecieran esos ojos invisibles que tiene atrás de su cabeza.

Me siento culpable por ir a trabajar y no quedarme en casa cuidando de mis hijos.

Muchas veces ocurre que por la necesidad de pagar cuentas y demandas de nuestros hijos nos vemos en la dificil situacion de volver a trabajar o no dejar de trabajar. Conversando con una amiga me mostro esta lectura tan linda que me hizo no sentirme tan culpable por no darles mi tiempo como antes. Me prometi que el dia que tenga hijos me dedicaria por completo a ellos y fue asi hasta que tuve la necesidad de tener que trabajar fuera de casa. Al principio fue muy muy dificil queria renunciar a la semana por que no soportaba estar tanto tiempo alejada de mis hijos, a medida que pasaba el tiempo deje de llorar y lamentar el tiempo que no pasaba con ellos. Ahora les compartire la lectura que me hizo sentir un poco mejor (aun sigo sintiendome culpable) pero sé que debo seguir asi por lo menos un par de años más.

Querida Mamá que trabaja:

Sé que a veces eres juzgada por otros por dejar a tus hijos en manos de otros, para trabajar. Algunos incluso insinúan que no amas a tus hijos tanto como las mamás de tiempo completo, y que es mucho mejor para los niños estar en casa con sus madres.
¿Cómo pueden decir esto sobre ti? Yo sé que amas a tus hijos tanto como cualquier otra mamá. Sé que la decisión de regresar a trabajar no fue fácil. Consideraste los pros y contras, mucho antes de siquiera concebir al bebé. Ha sido una de las decisiones más importantes de tu vida.
Te veo en todos lados. Eres la doctora a la que llevo a mi hijo cuando se enferma. La especialista en alergias, la que le diagnosticó a mi hija la reacción alérgica al cacahuate. Eres la psicoterapeuta que trató la espalda de mi esposo. La contadora que hace nuestros impuestos. La maestra de primaria de mis hijos. La directora de nuestro centro de cuidado. La maestra de gimnasia de mi hija. El agente de vienes raíces que nos vendió la casa. ¿Qué clase de mundo sería si no pudieras estar ahí para nosotras? Si hubieras sucumbido a la presión de los que te insistieron que el lugar de una madre es en la casa.
Sé que consideras a tu familia en cada trabajo que tomas. Sé que te paras una hora antes que nadie, para poder hacer ejercicio y tener un tiempo para ti. Sé que vas a juntas después de haber estado toda la noche despierta por tu bebé. Sé que cuando regresas a la casa en la noche, empieza tu segundo “trabajo”. Los que están en contra no entienden que atiendes una casa y mantienes un trabajo. Llegas a la casa, cocinas la cena, bañas a los niños y les lees historias. Los tapas y les das el beso de buenas noches. Pagas las cuentas, haces la compra del súper, lavas la ropa, los platos, tal como cualquier otra mamá.
Sé que seguido te sientes culpable sobre pasar tiempo lejos de tus hijos, así que sacrificas tu propio tiempo. Sé que no puedes tomarte “un día libre” para ti, cuando tus hijos están en la guardería o la escuela. Sé que aceptas que el trabajo es tu “tiempo libre”, por ahora. Sé que cuando estás en el trabajo no malgastas ni un solo minuto. Sé que comes en tu escritorio, no sales por café, y eres completamente dedicada y concentrada en tu trabajo. Al final, tú decides estar ahí. Quieres estar ahí.
Sé lo exigente que eres sobre la gente que cuida a tus hijos, y que esas guarderías ofrecen excelente cuidado. Sé que sólo dejas a tus hijos en un lugar en el que estás segura que son cuidados y amados. Sé que pasas muchos días cuidando a tus hijos cuando están enfermos, y sacrificas parte de tu quincena. Sé que secretamente te encantan esos días, y disfrutas estar con tus hijos.
Sé que a veces te sientes culpable de no estar ahí todo el tiempo. Pero, madre que trabaja… estás poniendo un ejemplo maravilloso a tus hijos. Les estás demostrando que una mujer puede tener una carrera y contribuir de cierta manera fuera de la casa, y aun así ser una madre amorosos. Les estás enseñando a tus hijas que pueden hacer lo que sea que se propongan en la vida. Estás mostrando fortaleza, dedicación, tenacidad, y lo haces con mucho gusto y amor.
Sólo quería que supieras que te entiendo. Porque las dos somos madres.

Mamá que no trabaja

18 febrero 2014

La buena intencion de nuestros hijos.

Poco a poco nuestros hijos van creciendo, se van volviendo cada vez más independientes aun que muchas veces nosotras mismas impidamos esto sin darnos cuenta. Llega una edad que ellos desean hacer todo por ayudarnos pero su limitada fuerza física obstaculiza y en algunas ocasiones frustra el hecho de querer ayudar. 

Hace un par de días me paso algo muy particular con uno de mis hijos que por lo general se emociona mucho y no mide su fuerza, él es muy servicial y bondadoso. En esta ocasión regresábamos del supermercado y habíamos puesto todas las compras en el carrito de compras para subirlo al departamento, con mucha voluntad me ayudo a sacar el cochecito del ascensor en entonces cuando volteo y me aproximo a abrir la puerta cuando escucho un sonido grande y estrepitoso; voltié a ver y era todo el carrito de comprar regado y todas las cosas de vidrio y delicadas echadas a perder, mi primera reacción fue mirarlo de manera acusadora pero por algún inusual motivo solo le dije que se retirara y le agradecí de ayudarme. 

Normalmente hubiera pegado un gran grito y hubiera terminado en llanto esa escena pero se me cruzo la idea que mi pequeño hijo puso su mayor esfuerzo en sacar el coche y aproximarlo a la casa. Lo rescatable de esta historia es ver dentro de alguna cosa diaria que nos pasan con nuestros pequeños la gran voluntad y las ganas que ponen ellos en querer ayudarnos, dejemos que se vuelvan independientes obviamente con una supervisión. Una reflexión que quizá a muchos nos pasó en algún momento de nuestras vidas. A seguir sonriendo.

13 agosto 2013

Sentimiento de ser mamá

Esta es una historia bastante conmovedora ya que salen los sentimientos de amor de una madre por su hijo. Estábamos sentados a la hora del almuerzo cuando mi hija casualmente mencionó que ella y su marido estaban pensando en “formar una familia”. - Estamos haciendo una encuesta – bromeó – ¿Crees tú que debería tener un bebé? - Te va a cambiar la vida – dije yo, manteniendo un tono neutral. - Ya sé – dijo ella, – no más dormir el fin de semana, no más vacaciones espontáneas – pero no era a eso a lo que yo me refería. Miré a mi hija, tratando de decidir qué decirle. Quería contarle que las heridas físicas de tener un bebé sanarían, pero convertirse en madre le dejaría una herida emocional tan grande que la haría para siempre vulnerable… Quería decirle que nunca más leería el diario sin preguntar: y si ese hubiera sido MI hijo?”. Que cada caída de avión, cada casa que se incendia, cada accidente de tránsito la van a perseguir. Que cuando vea una foto de un niño hambriento, se preguntará si no hay nada peor en la vida que ver a tu propio hijo morir. Miré sus manos con manicure y su perfecto traje de dos piezas y pensé que sin importar cuan sofisticada es ella, convertirse en madre la reducirá al nivel más primitivo donde lo más importante es proteger a su crío. Que el llamado urgente de “mamá!!!” le hará quebrar su fuente de cristal más fino sin siquiera dudarlo. Me gustaría advertirle que sin importar cuantos años ha invertido en su carrera, serán descarrilados por la maternidad. Podrá contratar una nana, pero algún día tendrá que ir a una importante reunión y recordará el dulce olor de su bebé. Tendrá que endurecer su corazón para no volver corriendo a casa, solo para asegurarse de que está bien. Quería decirle a mi hija que las decisiones comunes de cada día ya no serán rutina. Que la decisión de un niño de 5 años de ir al baño de varones en Mac Donald’s en vez de el de mujeres será un problema gigante. Allí, en medio de las bandejas y los gritos de otros niños, los asuntos de independencia e identidad de género chocarán contra la idea de un pedófilo esperando en ese baño de varones. Cualquier decisión que tome en la oficina, la repensará constantemente como madre. Mirando a mi atractiva hija, le quería asegurar que eventualmente perderá los kilitos de más del embarazo, pero nunca más se sentirá igual consigo misma. Que su vida, ahora tan importante, pasará a segundo plano una vez que su bebé haya nacido. Ahora que ella daría su vida en un momento por salvar a su bebé, también comenzará a pedir por más años de vida, no para cumplir sus sueños, sino para ver los de sus hijos cumplidos. Quería decirle que la cicatriz de la cesárea y las estrías se convertirían en sus medallas de honor. La relación de mi hija y su marido cambiará, pero no de la manera que ella piensa. Ojalá ella entendiera cuánto más se puede amar a un hombre que es cuidadoso para poner talco a su bebé o que siempre tiene tiempo para jugar con él. Quiero que sepa que se volverá a enamorar de su marido por razones que ahora encontraría muy poco románticas. Quisiera que ella pudiera sentir el lazo que tendrá con otras mujeres que han tratado de detener guerras, acabar con los prejuicios y no manejar bajo los efectos del alcohol. Quiero describirle a mi hija la felicidad que se siente al ver a tu hijo aprender a andar en bicicleta. Quiero capturar para ella la risita divertida de un bebé cuando toca por primera vez el pelaje de un perrito o de un gato. Quiero traspasarle esa alegría. - Nunca te arrepentirás – dije finalmente. La mirada interrogante de mi hija me hizo notar lágrimas en mis ojos. Me acerqué a ella, apreté sus manos y le deseé lo mejor, ya que había recibido el más maravilloso de los llamados…

21 mayo 2013

Matronatacion o natación antes de los 6 meses.

Muchas veces limitamos a nuestros hijos a desarrollar capacidades, o tener sensaciones que ayudaran a su desarrollo tanto físico, como sensorial, motriz y emocional. Gran parte de las veces los limitamos a la cuna, el Moises o simplemente nuestros brazos. 

 La matronatacion es una experiencia de gran aporte tanto como para los padres como para el bebé. En ella aflora el instinto de supervivencia y patrones nunca antes vistos ni manifestados de los bebes y mucho menos imaginados por los padres. 

Debemos tener en cuenta que la natación y control sobre el agua se desarrolla muchos años luego aproximadamente entre 4 o 5 años, podríamos ya hablar del dominio del cuerpo del infante sobre el agua y también de movimientos coordinados de natación propiamente dicha; sin embargo el gran aporte que se obtiene con la matronatacion son los siguientes: 

Desarrollo psicomotor: El bebé que aún no camina encuentra en el agua la posibilidad de moverse tridimensionalmente, siendo mucho mayor la libertad y continuidad de movimientos. A muy temprana edad comienzan a tener nociones de desplazamiento y distancia de una gran riqueza y sensibilidad, lo que redundará en una mayor coordinación motriz. 

Fortalecimiento del sistema cardiorrespiratorio: La natación fortalece el corazón y los pulmones. Debido al trabajo respiratorio que se realiza en el agua se aumenta la eficiencia en la oxigenación y traslado de la sangre. 

Ayuda al sistema inmunológico. 

Aumenta el coeficiente intelectual: Está demostrado que los bebés que han hecho natación en los 2 primeros años de vida desarrollan una percepción mayor del mundo que los rodea, con lo que ya están aprendiendo a ser más creativos y observadores. El agua estimula la capacidad de juego del niño y este hecho repercutirá muy positivamente en aprendizajes futuros. 

Mejora y fortalece la relación afectiva y cognitiva entre bebé-mamá-papá: La realización de un programa acuático para un bebé le llevará, junto con sus papás a compartir situaciones ricas y profundas que no sucederán de otra forma pues se van a juntar las reacciones innatas e instintivas del bebé con las propias vivencias que genera la práctica de la natación, que sin duda ayudaran al conocimiento mutuo, alimentando el amor y orgullo de mamá y papá. 

Inicia la socialización sin traumas en un ambiente lúdico y recreativo: Desarrollándose como personas y su entorno de una forma natural. La convivencia en la piscina con otros niños le ayudarán a relacionarse mejor, además de que aprenderá a compartir y realizar actividades junto a otras personas. El niño adquiere mas confianza para comunicarse y desarrollarse en grupo, ya que estará en constante contacto con instructores y niños. 

Desarrolla las habilidades vitales de supervivencia. Un ejemplo de ello es el aprender a girarse sobre su espalda y flotar ante una caída al agua. Ayuda al bebé a relajarse. Ayuda al bebé a sentirse más seguro.



06 febrero 2008

Problemas digestivos del lactante

En los cuatro primeros meses de vida el bebé debe duplicar su peso de nacimiento, por eso necesita comer mucho y a menudo. Cada bebé sigue sus propios ritmos de sueño y alimentación, tanto si ésta se realiza mediante pecho como con biberón.

Aunque el bebé dispone de una gran capacidad de adaptación, es posible que surjan algunos problemas digestivos que precisan atención:

Muguet

Esta afección por hongos (micosis) se caracteriza porque el bebé presenta unos puntos blanquecinos, como posos de leche, en los labios y el interior de la boca (encías, lengua, paladar o interior de las mejillas). Esta micosis irrita y provoca molestias en la boca impidiendo la alimentación normal.

En estos casos, el pediatra receta un tratamiento a base de antifúngicos locales o generales porque el muguet puede extenderse a las nalgas. También es muy importante seguir unas atenciones corporales estrictas durante los 10 ó 15 días que puede persistir el problema.

Regurgitación y vómito

El bebé regurgita y expulsa pequeñas cantidades de leche procedentes del esófago o del estómago sin que haya nauseas ni contracciones de los músculos del abdomen. Es habitual en las primeras semanas de vida y no suele influir en el incremento de peso. Normalmente las regurgitaciones disminuyen con el aumento de edad y desaparecen alrededor de los ocho meses.

La regurgitación no tiene nada en común con el vómito de gran cantidad de alimento acompañado de nauseas en bebés que no han vomitado con anterioridad. Este problema requiere la consulta médica.

Dolores de esófago

Cuando esto ocurre, el bebé se niega a tomar alimento, se retuerce y regurgita fácilmente. Puede tener dolores abdominales mientras se alimenta y, al terminar la toma, los eructos son ácidos y le irritan la mucosa del esófago.

El pediatra receta un tratamiento para administrar antes o después de las tomas y aconseja a los padres que después de ingerir el alimento se sujete al bebé en posición vertical mientras se sostiene la cabeza y la espalda. También es aconsejable acostarle con la cabeza un poco más elevada que el resto del cuerpo.

Hipo

Suele presentarse después de la toma y persistir algunos minutos. No tiene ningún peligro. Puede ocurrir que, al llegar el alimento al estómago, éste se distienda y provoque un movimiento reflejo del diafragma, que es el músculo de separación entre el tórax y el abdomen.

Negativa repentina a comer y beber

El bebé rechaza el pecho o el biberón. Llora, se retuerce agitando las piernas y vomita. Cuando parece que se calma, palidece agotado y vuelve a retorcerse de dolor. Ante esta sintomatología hay que acudir urgentemente al médico porque podría tratarse de una invaginación intestinal aguda.

Rechazo del alimento

Esta conducta siempre debe ser motivo de preocupación, sobre todo si no evoluciona el incremento normal de peso. Hay que consultar con el pediatra para descartar la existencia de alguna enfermedad y, en caso de que el bebé se encuentre sano, él os dará algunos consejos (evitar abrigarle en exceso para que no se adormezca, establecer un horario más rígido de alimentación, etc.).

Intolerancia a la leche

El bebé se muestra excesivamente apático o irritable. Otros síntomas son los vómitos, la erupción cutánea, la diarrea o el poco aumento de peso. Ante uno, varios o todos estos síntomas, el pediatra debe descartar la posibilidad de alergia a la leche o trastornos metabólicos congénitos. En cualquiera de los dos casos se impone la alimentación con la leche adaptada de fórmulas especiales.

Ictericia por leche materna

La ictericia tras el parto puede persistir hasta 10 y 15 días. Cuando se mantiene transcurrido este plazo y el bebé toma pecho, es muy posible que se trate de ictericia por leche materna. Este trastorno se debe a que el contenido en ácidos grasos de la leche inhibe el metabolismo normal de la bilirrubina. En estos casos la orina es clara y no existe incompatibilidad sanguínea con la madre. Conviene consultar con el pediatra, aunque esta ictericia no supone gravedad alguna. Sólo en el caso de que fuese muy intensa, la alimentación debería interrumpirse unos días pero, en general, no es necesario.

Estreñimiento

Los bebés con alimentación materna rara vez sufren estreñimiento.

El número de deposiciones varía mucho, normalmente entre 1 y 8 deposiciones diarias, o bien cada vez que realiza una toma.

La frecuencia de las deposiciones suele disminuir progresivamente a partir del primer mes, independientemente del tipo de alimentación. Al llegar a los tres meses, algunos bebés sufren estreñimiento, sobre todo si toman biberón, es posible que hagan una deposición cada tres o cuatro días. La evacuación del intestino se va regulando al introducir otros alimentos como la fruta y la verdura.

Cuando las heces son muy duras y supone un verdadero esfuerzo para el bebé evacuarlas, hay que consultar con el pediatra aunque es posible que sólo aconseje introducir zumos de naranja o uva en la dieta.

Diarreas

Después de nacer, a través de las primeras deposiciones, el bebé expulsa el meconio. Estas deposiciones son verdosas y negruzcas, pegajosas y sin olor. Unos días después el bebé defeca las heces de transición que son cada vez más amarillentas y menos abundantes, hasta que comienza la eliminación de heces normales.

La diarrea es muy rara en los bebés alimentados a pecho. Estos lactantes suelen hacer una deposición semilíquida después de cada toma, el color es amarillento, tiene olor ácido y pequeños grumos blanquecinos.

La verdadera diarrea se acompaña de malestar, distensión abdominal, estancamiento o disminución de peso y, en ocasiones, fiebre o vómitos.

Si se observa una variación repentina en las características de la deposición o aumenta el número de veces que el bebé defeca sin que haya cambiado la alimentación, hay que acudir al pediatra.

Los cólicos del lactante

En ocasiones, sobre todo al final de la tarde, el bebé se siente mal aunque ha comido hasta saciarse, ha eructado y no hay síntomas aparentes de enfermedad. El bebé llora de forma periódica, en ocasiones violentamente, porque tiene sensación de malestar debido a problemas digestivos que también le impiden establecer los ritmos del sueño. Los cólicos del lactante son un trastorno muy frecuente que suele desaparecer antes de los tres meses.

Los episodios de llanto agudo se pueden repetir varias veces a lo largo de un período de tiempo que puede durar hasta 3 ó 4 horas. Los síntomas más frecuentes de este trastorno son los siguientes:

-El bebé no consigue conciliar el sueño o bien se despierta repentinamente gritando y llorando, mientras se retuerce, enrojece o palidece.
-La tripa está tensa e inflamada, suelta gases y “le suenan las tripas”.
-Las deposiciones pueden tener un olor agridulce, un color verdoso, poca consistencia, y puede aparecer dermatitis de Jacquet por la acidez elevada de las heces.
-Está estreñido, se pone colorado, llora y se retuerce porque le supone un gran esfuerzo defecar. Las deposiciones son secas, como bolitas y poco frecuentes.

Cuando los cólicos son leves, el bebé se tranquiliza cogiéndolo en brazos y meciéndolo suavemente, pero si son intensos, el pediatra puede indicar la administración de algún medicamento que alivie el problema.

06 noviembre 2007

Vacunas para niños

A continuacion presentaremos un calendario de las vacunas que deben tener nuestros hijos y en los proximos articulos detallare las enfermedades y que reacciones traen.

A continuación se detallan sus nombres, contra qué son y cuando se le deben administrar al niño.

- La BCG se pone al nacer. El recién nacido no se puede ir del hospital sin esta vacuna contra la tuberculosis y en primer año básico de administra una dosis de refuerzo.

- La DTP corresponde a 2, 4 y 6 meses, luego a los 18 y a los 4 años. Esta vacuna es contra de la difteria, contra el tétano y contra la tos convulsiva coqueluche.

- La vacuna antipolio se coloca a los 2, 4 y seis meses, luego a los 18 y a los 4 años. Es anti la poliomielitis.

- La Hib corresponde a los 2, 4 y 6 meses. Es contra la Haemophilus Influenzae tipo B.

- La Tresvírica se administra a los 12 meses y en primero básico. Es contra el sarampión, la papera y contra la rubéola.

- La Toxoide DT se pone en segundo básico. Es contra la difteria y tétanos.

Se recomienda tambien estas como vacunas de rigor.

La vacuna neumocócica se administra a los 2, 4 y 6 meses y una a los 12 y 15 meses de edad.

La vacuna contra el rotavirus se pone a los 2 y 4 meses.


30 mayo 2007

A que edad empiezan a comer los bebes y que cosas pueden comer

Desde que nace hasta los dos años siempre la leche materna es lo mejor. Algunos pediatras dicen que basta con darles leche materna hasta los 6 meses que es la edad en que ya podemos darles nuevos alimentos. Como mamá les digo que es bueno darles nuevas proteinas y vitaminas a travez de los alimentos pero la "inmunidad ni con el alimento más caro o sofisticado se la daran por eso no descuiden la lactancia hasta los dos años en otro articulo les comentare como se va cambiando el habito de lactar.
Bueno segun la pediatra mi bebe pudo empezar a comer algunas cosas y mejor dicho casi nada a los 6 meses. Primero comio una papilla de arroz, (arroz aplasatado mezclado con mi leche) la comio tres dias seguidos y solo eso, para ver si presentaba alguna alergia o algo precido; menos mal que no. Luego a la semana me dijo que podia darle "platano de isla" me dijo que le saque la pepa( yo no sabia que el platano tenia pepa ) lo parti en la mitad y en medio tenia varias pepitas pequeñitas nos dijo que eso podia producirle apendicitis. También se lo dimos tres dias, se lo dimos en distintos recipientes para que sienta texturas y sabores distintos. Nos dijo que podiamso darle pera, papaya, manzana licuada, pure de papas casero y preparado con la leche materna, verduras zanahoria, espinaca, brocoli, todas las de hojas verdes, al 7mo mes nos dijo que ya podia comer pollo y pescado, al 8vo carnes rojas. Todo alimento nuevo que se introdusca en su dieta se le da uno por vez es decir si ya comia platano, pescado y pera y se le quiere introducir lentejas se le puede seguir dando los anteriores mas no otro alimento nuevo. (uno por vez durante 3 dias). Si no presenta ronchas, manchas, estornudos y nigun tipo de alergia puede seguir provando los otros alimetos, caso contrario acudir a la pediatra.
Fue muy trabajoso hacer eso pero ahora no sufre para comer ningun tipo de alimento ya sea verdura, fruta, cereales o legumbres, etc.
Es muy importante que no introduscan ningun tipo de citrico en la dieta del bebe hasta EL AÑO, si la introduce antes de ese tiempo resignese a los estornudos matutinos y alergias a los citricos, no desaprobeche este consejo que en el futuro beneficiara a su hijo y a usted .

15 agosto 2006

Lactancia materna

Frecuencia para dar de lactar: Continuamente, alternando ambos pechos por lo menos 15 min cada uno para evitar mastitis o infecciones que evitarian alimentar al bebé. Asegúrese de estar bien alimentanda , descanse lo suficiente y tome abundante liquido (preferiblemente lacteos para evitar la perdida de calcio). El momento en que está amamantando mire tiernamente al bebe (esto lo ayuda psicologicamnete), trate que sea relajado y tranquilo este gran momento.
No debe tener dolor al amamantar, es muy importante que el niño cubra toda la areola y el pezón para succionar adecuadamente.

VALORES NUTRICIONALES DE LA LECHE MATERNA

El porcentaje de calorías derivadas de proteinas es más bajo en la leche materna que en las fórmulas artificiales, pero con una proporción mayor de carbohidratos en forma de lactosa.

Beneficios para la madre

* Involuciona el utero mas rápida, por motivo de la PRL (prolactina) procursora de niveles de oxitócina.
* Recuperación de hemáties por ausencia de menstruación. (disminuye la anemia).
* Eliminación mas rápida de los depósitos grasos, por aumento del gasto de calorías, en la producción de leche.
* Menor riesgo de fractura de fémur en la mujer, en edades peri menopausicas y posterior.
* Menor riego de cáncer de mama, en la premenopausia.
* Disminuye el riesgo de cáncer de ovario.
* Facilita la unión psicológica madre-hijo.
* Eleva la autoestima de la madre.
* Disminuye la tristeza y/o depresión posparto.
*Facilita la recuperación mas fisiológica del tamaño mamario.
* Ahorro de tiempo en preparar biberones.
* Es mas económico.

Beneficios para el bebe

* Nutricionalmente superior a cualquier otra alternativa.
* Exclusiva adaptación para el bebé
* Siempre a temperatura ideal.
* No tiene fecha de caducidad.
* Siempre lista para tomar.
* Bacteriológicamente segura.
* Proporciona gran inmunidad ante enfermedades víricas y bacterianas
* Disminuye:
o El riego de meningitis.
o Infecciones intestinales.(diarreas).
o Infecciones de las vías urinarias.
o Neumonías.
o Infecciones de vías respiratorias altas (otitis, amigdalitis etc.)
o Infecciones de vías respiratorias: Bronquitis.
o Reduce la frecuencia de enterocolitis necrotizante.
* Mejora la evolución de los bebes pre-termino (prematuros)
* Disminuye la incidencia de muerte súbita del lactante.
* Reduce o previene el riesgo de padecer alergias, cuando existe una predisposición genética.
* Estimula el desarrollo inmunológico del lactante.
* Aumenta la respuesta inmunitaria de las vacunas.
* Disminuye el riesgo de diabetes insulinodependiente en la juventud.
* Hay autores que apuntan a un coeficiente intelectual más alto.
* Un crecimiento tanto físico como psicologícomás armonioso.
*Disminución de la obesidad de adultos.
*Aumenta a posterior el desarrollo de la integración social.
*Desarrolla y promociona la autoestima en el bebé.
*Produce apoyo psicológico
*Disminuye el riesgo de padecer terrores nocturnos. (pesadillas)

No cambies esat opcion por nada del mundo es lo mejor para tu bebé, dale pecho hasta los dos años. Que no te importe que piensan o que hagan las demas.

25 mayo 2006

El primer mes de mi bebe (1 mes)

Que cosas debe hacer mi hijo en el primer mes.

Debe levantar la cabeza por momentos, ya mueve brazos y piernas.
Aprieta cualquier objeto colocado en su mano.

Mira momentaneamente a la persona que se acerca.

Se queda quieto cuando oye un ruido.

LLora por alguna causa: frio, hambre, sueño, etc.

Su alimento es la leche materna ya que esta refuerza su sistema inmunologico, lo protege y lo nutre como ningun otro alimento. Es importante saber que la lactancia materna debe ser a libre demanda.

Un recién nacido aproximadamente pesa alrededor de 3.4 kilogramos, siendo mayor el peso de los varones con respecto a las niñas. Aproximadamente el 95 % de los recién nacidos a término tienen un peso que oscila entre 2.5 y 4.6 kilogramos. La talla promedio suele ser de 50 centímetros.

03 mayo 2006

Cuidados del cordon umbilical

Pasadas las primeras horas de la vida del bebé, el cordón umbilical se oscurece y seca progresivamente.

Se desprende normalmente entre el TERCER y DECIMO día de vida. Si tardase unos días más de lo mensionado, debe comunicárselo a su pediatra.

El ombligo debe permanecer SECO, CUBIERTO y LIBRE DE INFECCION, para que se desprenda lo antes posible.

Mientras el cordón no se caiga y la herida no cicatrice, lave al niño sin mojar el cordón.

Una vez que se haya desprendido se deben esperar 24 horas antes de bañar al niño por inmersión.

Si el muñón (donde estaba conectado el cordón) está húmedo, límpielo varias veces al día con un algodón empapado en alcohol. Esto ayudará a mantenerlo seco.

Trate de mantener el pañal por debajo del ombligo hasta que el cordón haya sanado completamente.

Un buen momento para revisar el muñón es siempre que le cambie el pañal.

Llame al médico si el ombligo se le pone rojo, sangra o huele mal.

Déle baños de esponja en lugar de sumergirlo en una tina con agua hasta que el cordón umbilical se le caiga y el ombligo sane por completo.

14 abril 2006

Primer dia del bebé

El primer dia en casa luego de la clinica u hospital es importante que la madre y el padre esten con los animos alegres y calmados ya que estos se transmiten al recien nacido, mas aun por la lactancia materna.

Particularmente cada vez que mi bebe despertaba cambiabamos su pañal y luego le daba leche ( de pecho ), tambien cada 6 horas con alcohol diluido en agua limpiabamos su cordon umbilical con mucho cuidado con una gasa ya que con algodon se pegarian las particulas y podria presentarse un cuadro de infeccion.

Para el baño, dejabamos pasar dos horas desde que lactaba para que metabolise bien y en la cama tendiamos un plastico grande encima un par de toallas, dos lavatorios uno con agua tibia y otro vacio, al costado su shampoo, jabon, torundas de algodon ( bolitas dobladas ) talco, pañal limpio, otra toalla con capucha y su ropita para despues del baño; una vez que teniamos todo listo desnudabamos al bebé y lo envolviamos en una de las dos tollas que estaban encima del plastico, siempre empezabamos con su carita, con una torunda humeda limpiabamos un ojo de adentro (por la nariz) hacia afuera (orejas) y seguiamos de la misma forma pero con otra torunda el otro ojo, despues su rostro, luego suvemente lavaba su cabeza con un poquito de shampoo, su papá lo cargaba, yo masajeaba suave tocando apenas la fontanela y le hechaba el agua con una tasa, cuando terminaba con su cabecita con otra toalla envolvia su cabecita para que no le de frio, despues lo descubria poco a poco a medida que iba lavando su cuerpito con las torundas de algodon (no le hechaba el jabon directo al cuerpo siempre a la torunda humeda.
Este baño de esponja las primeras tres o cautro veces nos tomaba casi 20 o 25 minutos, para un bebe es mucho tiempo esto pero a veces uno se entorpece con una criatura tan delicada y suave, pero no se preocupen a medida que pasan los dias esto se vuelve sencillo y mas rapido casi 10 o 15 minutos aproximadamente.
Me olvidaba cuando limpien los genitales de los varones no abran el prepucio hasta que su prediatra se los digan.
Con las niñas siempre hay que tener mucho cuidado ya que son mas propicias a presentar infecciones urinarias siempre "laven" y eviten usar los pañitos humedos ya que los genitales de las niñas son mucho mas delicados.

13 abril 2006

Recien Nacido

El primer dia de un recien nacido es el dia que observas a tu bebe, es lo mas hermoso del mundo, ya por primera vez puedes ver el rostro de esa personita o personitas ( mellizos, gemelos, etc) que estuvo en tu vientre mucho tiempo.
Pero tambien es una gran responsabilidad ya que es la primera vez tambien que cargaras, limpiaras, bañaras, alimentaras y cambiaras a tu bebe y esto te invita a ser una muy paciente, tolerante, humilde y sobre todo a tener más energias de lo acostumbrado ya que no dormiras por un buen tiempo bien o como acostumbrabas.